Ay vida mía ¿qué tantas pruebas me das?
No vez que me agoto, y a veces no puedo más
Me exiges que siga adelante y que sea fuerte
Sin embargo los problemas los tengo en frente.

Me arrodillo y te imploro que te apiades de mi alma
Llévame contigo y regálame un pedazo de tu calma
La luna ya no alumbra, se cansó; solo quedan las estrellas
Ni ellas me quieren iluminar ni en las noches me destellan.

Ay vida mía, ¿Cuál es mi propósito en la vida?
Anótalo en las nubes por si se me olvida
Muchos dicen que no entienden mi ansiedad
Pero yo solo quiero ser esa deferencia en la sociedad.

Ay vida mía ¿por qué eres tan incierta y tan compleja como yo?
¡Escúchame! y no pretendas vida mía que este lamento no lo oyó.